La proliferación de quejas, recogidas en medios de comunicación, de los productores de aceite y de los consumidores por la utilización de aceiteras rellenables en bares y restaurantes es una constante en el último mes. Diferentes factores, como por ejemplo el incremento de precio del aceite de oliva, han provocado que en materia de seguridad alimentaria se dé un paso atrás.
El uso de aceiteras rellenables para el aceite en el canal Horeca, que se pueden rellenar fácilmente, no garantizan en modo alguno la calidad del “oro líquido” y el cumplimiento de las normas de sus denominaciones de origen. Lo que crea más inseguridad en los consumidores, y disminuye la imagen del producto y del local que utiliza la aceitera.
Insistir en que el uso de los tapones irrellenables de Grupo Torrent garantizan el origen del aceite desde el embotellado hasta el consumo. Estas soluciones de cierres irrellenables, ofrecen facilidad de apertura y cierre, mejora de la estanqueidad, cuentan con un precio competitivo y admiten múltiples posibilidades decorativas. Ventajas determinantes para cerrar el aceite de oliva virgen extra. Además, estas cápsulas irrellenables disponen de una amplia variedad de sistemas dosificadores, que permiten cubrir cualquier demanda de nivel de vertido que soliciten los clientes.
UPA Andalucía reclama a la Junta más inspecciones en el canal Horeca para evitar el uso de aceiteras rellenables
El vicesecretario general de Agricultura de UPA Andalucía, (Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos), Francisco Moscoso, denuncia que, debido al precio actual del aceite de oliva virgen extra, está aumentando el número de establecimientos hosteleros que utilizan aceiteras rellenables, una práctica que está prohibida y que redunda en un perjuicio total de la mejor y más saludable grasa vegetal.
UPA Andalucía reclama a la Junta de Andalucía que refuerce los controles y las inspecciones, para evitar la proliferación del uso de aceiteras rellenables en establecimientos de hostelería, restauración y en los servicios de catering.
Según los últimos estudios realizados en innovación sobre vertido, una botella de aceite de oliva que esté cerrada con un tapón irrellenable se puede usar en decenas de ocasiones. Esto garantiza cada vez el control sobre el vertido, mantiene la limpieza de la botella y de las manos del consumidor y, por supuesto, es más sostenible frente al uso de otros dispensadores de aceite, como pueden ser las monodosis.
Y en lo que se refiere a la Norma que regula el desuso de las aceiteras, cabe recordar que el próximo mes de enero, se cumplen 10 años desde que entró en vigor la modificación del Real Decreto 1431/2003 por el que el Gobierno, siguiendo las directrices de la Unión Europea sobre el sector del Aceite de Oliva Virgen, “establece una serie de medidas encaminadas a mejorar la competitividad del sector oleícola, entre las que se encuentra estimular a los Estados miembros a prohibir el uso de aceiteras rellenables y exigir la utilización de envases que no permitan el relleno en el canal HORECA”.
La Ley específica que, “en los establecimientos del sector de la hostelería y la restauración y en los servicios de catering, los aceites se pondrán a disposición del consumidor final en envases etiquetados y provistos de un sistema de apertura que pierda su integridad tras su primera utilización”.
Por tanto para combatir la proliferación del uso de de aceiteras rellenables: “Los envases que por su capacidad se puedan poner a disposición de los consumidores finales más de una vez, dispondrán además de un sistema de protección que impida su reutilización una vez agotada su contenido original”.
Grupo Torrent es líder mundial en la producción de tapones irrellenables para Aceite de Oliva Virgen Extra (AOVE) y vinagres. La compañía, de capital familiar, lleva más de 100 años ofreciendo soluciones de cierres para los sectores del aceite de oliva (AOVE), licores y vinos a nivel mundial. La trayectoria de Grupo Torrent está ligada a la innovación y la excelencia constante en la búsqueda de soluciones de cierres.